Hoy traigo una receta muy sencilla para hacer las típicas tortitas americanas. Cuando se las enseñé a mis amigos lo primero que me dijeron es que las había echo con la mezcla preparada que venden en los supermercados, no se creían que me hubiesen salido tan bien y sinceramente, yo tampoco. A mí me encanta la repostería, aunque no soy muy dada a cocinar me gusta experimentar con recetas nuevas; y esta es genial porque es súper fácil de hacer y se hace en un momento. Son perfectas para desayunar y merendar y puedes echarle todos los ingredientes que quieras, desde dulce a salado, añadiendolo en la misma masa o cuando lo hayas terminado.
Con estas medidas me salieron unas 6 tortitas:
- 2 huevos
- 200 ml de leche
- una cucharada de azúcar
- una cucharada de aceite
- una pizca de sal
- 200 gr de harina de trigo
- 3 cucharaditas de levadura Royal
- unas gotas de esencia de vainilla
En un bol batimos los huevos y añadimos la leche, el azúcar, el aceite y la sal y mezclamos bien.
Añadimos la harina mezclada con la levadura y batimos bien, y cuando esté bien ligado le echamos las gotas de esencia de vainilla.
La masa hay que dejarla reposar media hora en el frigorífico.
En una sartén untamos aceite y lo ponemos a fuego medio-alto. Cuando el aceite esté bien caliente, con la ayuda de un cucharón echamos la masa en la sartén formando un círculo en el centro que, poco a poco, se irá extendiendo. Cuando en la masa veamos aparecer unas pequeñas burbujas querrá decir que le tendremos que dar la vuelta con la ayuda de una espátula. Calculamos un minuto mas o menos y la sacamos.
Es importante ir dejando una tortita encima de otra para que no pierdan calor.
Yo les eché sirope de chocolate por encima, porque era lo que tenía mas a mano, pero las posibilidades son infinitas: nata, nutella, sirope de arce, trozos de fruta e incluso si las quieres hacer saladas; jamón york, queso o presentarlas con huevo frito y bacon.
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